jueves, 2 de abril de 2009

una ciudad muy lejos de casa



¿Viste esos días en los que te sentas a mirar por la ventana y simplemente no tenés nada para decirle a nadie? Cuando afuera está lloviendo y pensas que no te importa porque de todos modos no ibas a salir, pero en realidad quisieras que haya un poquito de sol para poder mirar y entrecerrando los ojos para ver a la persona que tenés enfrente decirle: ¡hola! ¡Qué bueno que estes! ¿Querés un mate?
Los párpados tienen un peso que es inversamente proporcional al del alma

2 comentarios:

Nan dijo...

el mate eleva los párpados a mí al menos... y al alma yo sino quien

Nan dijo...

con su permiso es ud ahora uno de mis cien volando..con todo respeto pata derecha incluida